Hoguera particular

Coincidiendo con la noche de San Juan salimos a la calle para quemar los muebles viejos.
Me gusta pensar que por una noche he emulado a Maarten Baas, salvando las distancias, finiquitando su colección "Smoke".
Esas diferencias, de momento insalvables, son dos:
- Baas reviste sus muebles con resinas que los protegen de ser destruidos en la quema. El aspecto final es un mueble carbonizado, pero integro.  (Todavia no he descubierto la fórmula de esa resina),
- El mobiliario que quema son clásicos del diseño. Desde Rietveld a Gaudi, pasando por los Eames. (Si tuviera una silla de Dali, no la quemaría).
El concepto es flipante. Controlar la acción y los efectos del fuego.